Que ver en Válor – Los 10 imprescindibles

Descubre los mejores lugares que ver en Válor, un pequeño tesoro de la Alpujarra granadina donde el tiempo parece detenerse. Entre callejones encalados, huertos en terrazas y aromas a leña, el pueblo conserva intacta la esencia andalusí que le da alma.

Hay algo profundamente romántico en Válor. Encaramado sobre la ladera y rodeado por las sierras de la Contraviesa, Gádor y Nevada, el pueblo luce su historia con orgullo. Su iglesia mudéjar, los barrios tradicionales y las vistas infinitas hacen de este rincón uno de los más bellos y auténticos del sur de Granada.

Pocos saben que Válor fue tierra de rebeldía y leyenda, ligada para siempre al nombre de Abén Humeya, el último rey morisco de la Alpujarra. Caminar por sus calles es revivir aquella historia, entre ermitas, puentes andalusíes y barrios que conservan el trazado medieval.

Sigue leyendo para conocer cada uno de los lugares imprescindibles que ver en Válor, desde sus templos y miradores hasta sus barrios más pintorescos. Una ruta entre historia, paisajes y alma alpujarreña. ¡Vamos a ello!

Iglesia parroquial de San José

La Iglesia Parroquial de San José te recibe en cuanto pones un pie en Válor. Es un templo mudéjar del siglo XVI levantado sobre una antigua mezquita, con artesonado de madera que merece que alces la vista. Dentro te esperan el Santo Cristo de la Yedra y una Inmaculada vinculada a la escuela de Alonso Cano.

Está en pleno casco histórico y fue lo primero que vimos al aparcar, pero la encontramos cerrada. Da un paseo por las calles de alrededor y tómate un rato frente a su fachada. Es un monumento imprescindible que ver en Válor.

Casa de Aben Humeya

La Casa de Aben Humeya es un rincón muy interesante, porque aquí late el recuerdo de Fernando de Córdoba y Válor, más conocido como Aben Humeya, aquel líder morisco que plantó cara en la rebelión de las Alpujarras en el siglo XVI. Acércate, mira los detalles y date una vuelta por las calles de alrededor. Es uno de esos sitios que te ayudan a entender mejor la historia de Válor.

Ermita de Ntra Sra de Lourdes

En el barrio de la Estación, a las afueras del centro de Válor, se levanta la Ermita de Nuestra Señora de Lourdes. Es un pequeño templo con historia, de esos que conservan la esencia del pueblo aunque el tiempo haya dejado su huella. A pesar de su estado deteriorado, sigue siendo un lugar querido por los vecinos. Cuando te acerques, fíjate en su sencillez y en el pequeño cementerio que descansa junto al lateral sur.

Puente de la Tableta

El Puente de la Tableta cruza el río Válor y formaba parte del antiguo Camino Real que unía Granada con Almería, una ruta clave siglos atrás. Su arco apuntado y su estructura de origen nazarí conservan ese aire andalusí que todavía domina muchos rincones de la Alpujarra. No es difícil imaginar a Pedro Antonio de Alarcón cruzándolo en 1874, cuando lo describió en su libro La Alpujarra con todo lujo de detalle.

Hoy el entorno mantiene su encanto rural, rodeado de vegetación y con el rumor del río acompañando el paseo. A nosotros nos pareció un enclave muy pintoresco, perfecto para relajarse, escuchar el agua y pensar en todas las historias que han pasado por este viejo puente.

Muy cerca se encuentra la Fuente Agria de Válor, un tesoro de aguas ferruginosas con propiedades medicinales. Este es uno de esos rincones que completan cualquier visita a Válor.

Lavadero de la Fuente de la Bajona

El Lavadero de la Fuente de la Bajona es uno de esos rincones sencillos que cuentan mucho sobre la vida cotidiana de Válor. Aún se conserva el sonido del agua cayendo entre las pilas de piedra, donde antaño las vecinas lavaban la ropa y compartían charlas al ritmo del murmullo de la fuente.

Barrio Cantarranas

El Barrio Cantarranas fue, sin duda, nuestro rincón favorito de Válor. Situado en la parte baja del pueblo, entre huertos y caminos tranquilos, este barrio típicamente alpujarreño está formado por un conjunto de casas que se remontan a los siglos X al XV. Paseando por sus tinaos, adarves y callejones estrechos sentirás la herencia andalusí que aún late en sus muros. Es un lugar pintoresco y fotogénico, perfecto para perderte un rato y disfrutar de la autenticidad de uno de los rincones más bonitos que ver en Válor.

Eras de La Jarea

Al final del barrio de La Jarea te esperan las antiguas eras de trilla, dos plataformas escalonadas con una panorámica preciosa del pueblo a tus pies y, al fondo, las sierras de la Contraviesa, Gádor y Nevada. Es un rincón sencillo y muy fotogénico, perfecto para ver cómo cae la tarde.

Nechite (Válor)

Nechite es un anejo del pueblo granadino de Válor. Su arquitectura tradicional está muy bien cuidada y nos pareció ideal para completar la visita a Válor. No te pierdas la Iglesia de la Virgen de la Antigua, De origen mudéjar del siglo XVI y con toques barrocos, tiene planta rectangular y presbiterio. Fíjate en el fragmento de cruz de mármol en el arco de la portada, posible recuerdo de la Rebelión Morisca. La torre guarda dos campanas y reloj. Hay noticias desde 1504, fue saqueada en 1569 y se reconstruyó a inicios del XVII. Dentro verás a la Virgen de la Antigua, flanqueada por el Sagrado Corazón de Jesús y San Marcos.

Puedes llegar en coche o a pie por el GR-7 desde Válor, en un paseo sencillo con vistas abiertas a los bancales y a la sierra.

Mecina Alfahar (Válor)

Mecina Alfahar, anejo de Válor, te regala un paseo tranquilo entre detalles con historia. Asómate a su iglesia decimonónica, la última levantada en La Alpujarra, que aun siendo moderna conserva guiños mudéjares en la portada y en la armadura. En la plaza, la fuente de piedra de cantería con pilar abrevadero y dos caños sigue cumpliendo su papel.

Dónde dormir en Válor

Si estás buscando un lugar con encanto donde dormir en Válor, te recomiendo echar un vistazo a El Balcón de Válor. Es uno de esos alojamientos que encajan a la perfección con el espíritu de la Alpujarra: tranquilo, acogedor y rodeado de naturaleza. El complejo está formado por nueve casas independientes, ideales tanto para parejas como para grupos. Hay una casita pensada para dos personas, varias para cuatro o seis, e incluso alguna más grande para ocho, perfecta si viajas en familia o con amigos.

Cada casa tiene su propia cocina equipada, muchas cuentan con barbacoa privada y, desde los balcones, las vistas al pueblo y a las montañas son simplemente espectaculares. En verano, la piscina se convierten en el punto perfecto para relajarse y también dispone de zona ajardinada para que los niños jueguen al aire libre.

El lugar desprende ese encanto alpujarreño que cuesta encontrar, con detalles cuidados y un ambiente muy familiar. Su anfitrión, Manuel, mantiene el complejo muy bien cuidado, el jardín impecable y de que todo esté perfecto para los huéspedes. Además, cuenta con aparcamiento a solo dos minutos de las casas, lo que lo hace aún más cómodo y es petfriendly, por lo que pudimos disfrutar con Bagán.

Un rincón auténtico, con alma, donde es fácil sentirse como en casa desde el primer día.

Nosotros dimos con este alojamiento gracias a Alohacamp. Si te animas, en tu primera reserva puedes disfrutar de 20 € de descuento, una ayudita extra para escaparte a Válor y desconectar de verdad.

Dónde comer en Válor

En Válor se come bien, con platos caseros y sabores de toda la vida. Nosotros paramos a comer en el Restaurante Aben Humeya, situado en pleno centro del pueblo, y aprovechamos para tomar unas tapas. Es un lugar muy típico, con buena cocina local y un trato cercano.

Uno de los platos más tradicionales de Válor es el arroz liberal, una receta que solo preparan bajo encargo para un mínimo de cuatro personas, avisando con un día de antelación. Es un arroz de montaña con carne por lo que si viajas en grupo, merece la pena reservarlo con tiempo.

En el Aben Humeya también puedes probar otros platos típicos como el plato alpujarreño, que combina los productos más representativos de la sierra: patatas a lo pobre, morcilla, chorizo, lomo de orza, huevo frito y jamón serrano. Es un plato contundente y perfecto para reponer fuerzas después de una ruta por los alrededores.

Cómo llegar a Válor

Llegar a Válor es sencillo, aunque como todo buen rincón de la Alpujarra, el camino incluye curvas y paisajes que obligan a parar de vez en cuando para admirar el entorno. El pueblo está situado en el corazón de la Alpujarra granadina, a unos 1.200 metros de altitud, entre montañas, barrancos y castaños.

Desde Granada, la forma más habitual es ir por la A-44 dirección Motril y desviarte por la A-348, pasando por Lanjarón, Órgiva y Pampaneira. Sin embargo, nosotros decidimos hacer el trayecto por Guadix, una ruta algo más tranquila y con menos tráfico. Desde Granada tomamos la A-92 dirección Almería hasta llegar a Guadix, y desde allí seguimos por la A-337 en dirección a La Calahorra, cruzando el Puerto de la Ragua, uno de los pasos de montaña más espectaculares de Sierra Nevada. El recorrido es precioso, con vistas a los picos más altos, pero en invierno, ten cuidado por si la carretera pudiera estar con hielo.

Desde Almería, el acceso es incluso más directo. Basta con tomar la A-348 hacia Guadix/Bérchules y continuar por la misma carretera que serpentea entre olivares y cortijos hasta llegar a Válor. El viaje dura alrededor de una hora y media y ofrece unas vistas espectaculares de la Alpujarra almeriense y granadina.

En cualquier caso, el coche es la mejor opción para moverte por la zona, ya que te permitirá explorar los pueblos cercanos.

Dónde aparcar en Válor

Aparcar en Válor no suele ser complicado, aunque como en la mayoría de los pueblos de la Alpujarra, las calles del centro son estrechas y empinadas. Si no quieres callejear ni complicarte demasiado, lo mejor es dejar el coche en la calle Carretera, la vía principal que atraviesa el pueblo.

Desde allí puedes moverte a pie sin problema, ya que prácticamente todo está cerca. Además, suele haber hueco para aparcar a pocos metros, sobre todo si llegas temprano o fuera de los fines de semana.

Qué ver cerca de Válor

Desde Válor puedes descubrir algunos de los pueblos más auténticos y bonitos de la Alpujarra. Muy cerca se encuentra la Alpujarra de la Sierra, conocida como el pueblo libro, ya que está formado por varias localidades que parecen sacadas de un cuento: Yegen, Mecina Bombarón, Montenegro y El Golco. Nosotros visitamos Yegen y Mecina Bombarón, que son los que más encanto tienen. En Yegen podrás seguir las huellas del escritor Gerald Brenan, con paneles y citas literarias repartidas por el pueblo, mientras que Mecina conserva ese aire rural alpujarreño con casas encaladas, fuentes y calles empedradas.

Si te apetece seguir la ruta, no puede faltar una visita a Trevélez, uno de los pueblos más altos de España y famoso por su jamón de Trevélez. Pasear por sus calles escalonadas con vistas al Veleta es una experiencia única. También merece la pena acercarse a Pórtugos, donde puedes visitar la Fuente Agria, conocida por sus aguas ferruginosas, y disfrutar del entorno natural.

Más al oeste, los pueblos de Capileira, Bubión y Pampaneira forman el trío más pintoresco del Barranco de Poqueira. Sus calles empedradas, chimeneas humeantes y tiendecitas de artesanía son puro encanto. Y si continúas hacia el valle, Lanjarón, la puerta de la Alpujarra, te recibirá con su balneario y su ambiente alegre, lleno de flores y fuentes u Órgiva.Tampoco te pierdas Soportújar el famoso pueblo de las brujas.

Aunque algunos de estos pueblos queden un poco más lejos de Válor, todos merecen la visita. En el blog tenemos un artículo completo sobre qué ver en la Alpujarra de Granada, con rutas, consejos y los lugares que más nos enamoraron.

Con esto damos por finalizado nuestro artículo sobre que ver en Válor, ¿te animas a visitar este precioso pueblo alpujarreño?

¡Nos vemos en el próximo post de Pasaporte a La Tierra!